Siguiendo con el análisis del material didáctico para estudiar y aprender japonés os voy a presentar una herramienta útil para todas aquellas personas que ya han empezado a estudiar el idioma. No siempre el libro de texto es suficiente para aprender el idioma ya que éste nos muestra el uso pragmático de la lengua dentro de unos contextos determinados.
Precisamente el aprendizaje del idioma surge de los textos y acaba en los textos. Una manera fácil de entender el uso y el significado de una determinada estructura sintáctica es viéndola en su uso pragmático, es decir, como los nativos utilizan ese determinado patrón dentro de su contexto sociocultural. Pero, ¿qué sucede cuando estamos leyendo un manga o una novela de Murakami y nos encontramos con una estructura que no hemos estudiado?
Un diccionario lexicográfio no siempre nos da la solución a nuestras necesidades. Necesitamos una herramienta más que nos ayude a entender lo que estamos leyendo en dos niveles: el sintáctico para observar como se construye ese determinado patrón y el semántico, su significado, que estará ligado también a su sentido pragmático que nos ofrece el marco del texto que estamos leyendo. Si no sabemos por el contexto el significado de la frase que leemos no tenemos más remedio que recurrir a los diccionarios gramaticales.
Todas los idiomas que se estudian como lenguas extranjeras tienen diccionarios gramaticales, los tienen el catalán, el castellano, el francés y por supuesto el japonés. Para los hispanohablantes tenemos el llamado «Bunpô», un diccionario de gramática descriptiva de la lengua japonesa escritos por Lourdes Porta y Junichi Matsûra para hispanohablantes pero al ser descriptivo no nos ofrece el sentido pragmático de la gramática japonesa.
Además, el nivel gramatical al que llega no supera apenas el B1 (nivel intermedio del MCERL) y se queda rápidamente pequeño para aquellos que quedan profundizar aún más en el aprendizaje del idioma. Entonces al estudiante le surge una pregunta inevitable: ¿Qué diccionarios gramaticales se necesitan?
Mi recomendación es utilizar los diccionarios gramaticales de The Japan Times creados por Seiichi Makino y Michio Tsutsui. Fueron editados por primera vez en 1986 y en el 2010 ya se habían impreso 63 ediciones. Sin duda la calidad de esta colección de diccionarios gramaticales es excelente y el paso del tiempo no los ha dejado para nada obsoletos.
1. La colección de diccionarios de The Japan Times.
Esta colección de diccionarios consta de tres volumenes. Los tres volumenes tienen alrededor de unas 600 páginas. El tamaño es de 17 cms x 14 cms, por lo tanto no son muy voluminosos en comparación con los diccionarios lexicográficos. Según en que librería lo compres, ya sea online o ya sea física puede rondar entre los 50 y 75 euros cada volúmen. Entonces esta colección está formada por los siguientes libros:
- A dictionary of basic japanese grammar (A1/A2 – Nôken 5-4).
- A dictionary of intermediate japanese grammar (B1 /B2 – Nôken 3-2)
- A dictionary of advanced japanese grammar (C1/C2 – Nôken 2-1).
Entre paréntesis he puesto los niveles del MCERL y de los Nôken. Aunque los niveles entre los dos niveles de exámen no llegan a ser exactamente iguales ya que un B2 de japonés está por debajo del nôken 2, el título oficial con los cuales Fundación Japón certifica el nivel de japonés de los usuarios no nativos.
2. La estructura interna de los diccionarios.
Los tres diccionarios tienen la misma estructura interna y que ahora presento. Por lo tanto en cada uno de los volumenes vamos a encontrar lo siguiente:
- Prefacio (1 página).
- Indicaciones para el lector (2 páginas).
- Lista de abrevaciones (1 página).
- Lista de símbolos (1 página).
- Términos gramaticales (16 páginas).
- Características de la gramática japonesa: orden sintáctico, tema, elipsis, pronombres personales, la voz pasiva, lenguaje formal y honorífico, partículas finales, onomatopeyas (43 páginas).
- El Corpus General de la gramática del nivel (510 páginas).
- Apéndices: Conjugaciones, clasificación semántica de verbos y adjetivos, verbos transitivos e intransitivos, conectores, demostrativos, numerales y contadores, formación de palabras compuestas… (44 páginas).
- Índice gramatical (2 páginas)
- Índice gramatical en inglés (3 páginas).
- Índice gramatical en japonés (5 páginas).
- Referencias (2 páginas).
3. La macroestructura y la microestructura.
Este diccionario está escrito en lengua inglesa. En cuanto al Corpus del diccionario tiene un alfabético ya que la división gramatical está basada en la palabra base que da el sentido semántico está romanizada. Por ejemplo, si buscamos la estructura y el uso de la partícula » ばかり», lo buscaremos como «bakari».
Al igual que los diccionarios lexicográficos, el Corpus de este diccionario también tiene una macroestructuctura que se lee en horizontal y una microestructura que se lee en vertical como veremos en la siguiente imagen:
Las páginas elegidas son la 148 y la 149. Observamos que en color rojo está la entrada de la palabra base de la estructura que queremos estudiar, en este caso la marca del superlativo en japonés que es «ichiban», literalmente «número uno» pero que a nivel semántico-pragmático equivaldría a «lo que más, el que más». Al lado de la entrada en rojo nos indica que tiene una función adverbial. Abajo nos indica su función superlativa y al lado su traducción al inglés como «most». Esta sería la macroestructura que seguiría con la siguiente entrada que es el verbo «iku» (ir).
Una vez leída las características principales de «ichiban» entramos en la microestructura del Corpus y que tiene un orden horizontal. En el primer recuadro que observamos es la palabra base dentro de su contexto sintáctico, es decir, dentro de su contexto gramatical. Podemos observar que «ichiban» suele ir acompañado de la particula «no naka de». Al estar en rojo significa que son imprescindibles para saber usar esta estructura completa y son también la base de su significado y uso.
El recuadro nos ofrece un ejemplo descriptivo de como se construye correctamente esta estructura en japonés, abajo nos viene la romanización y la traducción en inglés: El señor Okawa es el más alto de la clase. El siguiento punto que observamos es la formación y combinación de «ichiban» con adjetivos, verbos y adverbios. Después veremos ejemplos de esta estructura en su significado literal y pragmático. Finalmente veremos el apartado de notas donde leeremos las excepciones y otros usos particulares de estas estructuras.
El diccionario básico es dónde encontraremos la mayoría de las explicaciones gramaticales en la macroestructura ya que en los volúmenes intermedio y avanzado la información gramatical cada vez será menor y solo tendremos la traducción de las estructuras. Esto es así porque se supone que el estudiante ya conoce la mayoría de las características de la entrada gramatical que esta buscando y solo aportan pequeños matices a su significado.
Personalmente es una colección de diccionarios que aconsejo adquirir si de verdad estás interesado en aprender esta lengua. Su aportación gramatical es rica y suple notablemente las carencias que tienen los libros de texto al no abarcar todas las estructuras gramaticales del japonés. Además si eres un lector habitual de manga en japonés también podrás comprobar las diferencias entre la lengua estandar que se aprende en las escuelas y que recogen los diccionarios en comparación con el japonés vulgar no estandarizado que se utiliza en el manga y que exagera el lengua oral que utilizan los japoneses.
- MAKINO, Seiichi & TSUTSUI, Michio.(1986/2010).»A Dictionary of Basic Japanese Grammar».The Japan Times.Tokio
Esos libros fueron, con diferencia, el mejor material que encontré para estudiar japonés. Lamentablemente, su empeño por ser metódico y explicarlo todo hacen que su enorme calidad se quede perdida por las ramas y quien aterrice por aquí pensará que es un «product placement» más o quien sabe qué. La parrafada con la que pretende dar una coartada intelectual a la necesidad de usar estos volúmenes será ignorada por todo aquel que se haya tomado en serio el estudio del japonés. Harán lo mismo, por motivos opuestos, los diletantes que solo quieren probar.
Sorprende que alguien con tal afición por el manga se ponga tan serio a la hora de escribir sobre el japonés y no copie la manera tan directa que tiene de comunicar algo ese tipo de comics. Entre decir «SON JODIDAMENTE BUENOS» sin añadir más y dar las explicaciones que usted da, hay un término medio que agradece cualquier lector. Navegando por su blog veo que una entrada sobre la metafísica sincrética en Japón convive con un tal «Óscar renunciando a su amor por Von Fersen» a su lado, en la columna derecha. Lo del término medio no va entonces con usted aunque, bien mirado, usted mismo es la encarnación de esa mitad porque es difícil encontrar ese tipo de mezclas en un mismo lugar.
En cualquier caso, un saludo afectuoso y celebro que alguien se acuerde de unos libros tan insulsos por fuera (el que diseñó la portada no murió por el esfuerzo) como jugosísimos por dentro.
Querido Rafael.
Primero de todo muchas gracias por su comentario. Desde que empecé a escribir este blog quise darle un punto serio sin aportar ningún toque «friki» a las entradas. Para eso ya tengo otras plataformas como Instagram donde ha visto la referencia de «La Rosa de Versalles». Sí, en mi blog tengo enlazado twitter e instagram y los lectores pueden leer otras cosas que escribo en otras redes sociales.
Sobre el tema del manga, si no fuera por este género del cómic, no me hubiera dedicado a estudiar esta lengua. Tampoco hubiera ido a la universidad ni hubiera estudiado otros aspectos culturales de Japón. Por supuesto, tampoco me habría planteado estudiar y acabar un máster de lingüística, ni mucho menos intentar empezar un doctorado.
Por cierto, si no fuera por el manga mucho el japonés sería una lengua mucho menos conocida y muy poco estudiada en nuestro país. Además, que me guste el manga no significa que no pueda tratar este género o el japonés desde un punto de vista serio y objetivo. Así que, ¡viva el manga!
Le empecé a responder aquí pero al final me quedó un poco largo y le he mandado un email. Un saludo.